Trenza hojaldrada rellena de pimientos

Es tiempo de volver de las vacaciones, de acostumbrarnos a los horarios de la rutina, a organizar de nuevo nuestras vidas y sobretodo, es hora de cocinar. Yo este año he estado por aquí, como muchos ya lo habréis visto que he ido publicando recetas durante todo el verano pero ahora que ya vais llegando los demás os quiero dar la bienvenida con esta receta.

En especial le dedico esta trenza a Neus de "Cocinando con Neus" que fue la que me inspiró en hacerla cuando la vi en su blog. Quién no la conozca, decir que a parte de compartir buenas recetas es encantadora. Va por ti Neus!

Ingredientes


1 masa de hojaldre

Pimientos rojos asados

Atún

Aceitunas

2 huevos duros

Queso rallado

Semillas de sésamo

Orégano



Preparación


Con antelación asamos los pimientos rojos. Los lavamos y los envolvemos en papel de aluminio. Horneamos a 250º unos 20 minutos aprox. o hasta que estén tiernos. Pasado este tiempo, los metemos en una bolsa de plástico para que suden y facilitar a la hora de pelarlos. Cuando se enfríen, los pelamos y cortamos a tiras.

Cocemos los huevos durante 10 minutos, pelamos y reservamos.

Disponemos la masa de hojaldre estirada en la bandeja del horno, dividimos tres columnas y marcamos con suavidad dos líneas longitudinales con el cuchillo que nos harán de guía, sin llegar a cortar. En las dos columnas laterales, cortamos tiras en diagonal ambas en el mismo sentido y paralelas (imagen 1).

En la parte central, dejando unos 2 dedos arriba y abajo, colocamos el atún desmigado y bien escurrido, las tiras de pimiento, las aceitunas laminadas, el huevo duro picado y por último el queso rallado (imagen 2). El tercer paso es cerrar con las tiras en forma de trenza. Para ello primero cerramos por la parte superior y vamos cruzando una tira de la derecha y otra de izquierda y así hasta cerrarla completamente (imagen 3).




Pintamos la superficie con un poco de aceite y espolvoreamos con las semillas de sésamo y el orégano.

Horneamos a 200º durante 20 minutos o hasta que la superficie esté dorada.