Hace tiempo que tenía esta receta en la recámara y por petición de unas amigas hoy os la presento. Muchos de vosotros ya lo conocéis, es la famosa tortuga. Yo la he hecho en dos ocasiones y decir que a pesar de que es una tarta bastante entretenida y que requiere sus tiempos de reposo, debo decir que no resulta nada difícil y el resultado es espectacular, no hay más que ver la carita de esta simpática tortuga.
Animo a todos a que no tengáis ni miedo ni pereza al hacerla que seguro que repetiréis.
Ingredientes
Bizcocho genovés para el brazo de gitano
Nocilla
2 mini croissants
Para la mousse
400 gr de nata para montar
1 tableta de chocolate foundant
3 claras
150 ml de leche
50 gr de azúcar
4 hojas de gelatina
Preparación
En primer lugar preparamos el bizcocho genovés.
Una vez horneado, lo enrrollamos en un paño de cocina humedecido y lo dejamos hasta que se enfríe (figura 1 y 2)
Pasado este tiempo lo desenrrollamos, lo untamos con nocilla y lo volvemos a enrrollar. Presionamos bien para que coja la forma de un brazo de gitano y lo cortamos a rodajas de unos 2 cm de grosor (figura 3 y 4)
En un bol o ensaladera previamente forrado con papel film disponemos las rodajas del brazo tapando toda la superficie y reservamos (figura 5)
A continuación preparamos el mousse.
En la thermomix colocamos la mariposa en las cuchillas y montamos las claras de huevo durante 3 minutos velocidad 3 y reservamos.
Montamos la nata a velocidad 3 y 1/2 hasta que esté bien montada, le añadimos los 50 gr de azúcar y reservamos.
En un bol derrretimos el chocolate en el microondas, primero programamos unos segundos y removemos, unos segundos más y volvemos a mover así hasta que esté totalmente derretido. Si programamos mucho tiempo seguido el chocolate se quemará.
En 50 ml de leche fría hidratamos las hojas de gelatina y calentamos el resto de leche en la thermomix hasta casi ebullición, agregamos la gelatina hidratada y programamos 30 segundos velocidad 3 para que se disuelva bien. Añadimos el chocolate fundido y programamos 1 minuto a velocidad 3. Lo disponemos en un bol y dejamos que temple un rato.
Una vez frío añadimos las claras y la nata montada y mezclamos con movimientos envolventes para que no baje la mezcla.
Vertemos la mousse sobre el bol con el brazo de gitano y lo tapamos con más rodajas de bizcocho (figura 6 y 7)
Lo tapamos bien con papel film y lo metemos en la nevera durante unas 6 horas o mejor de un día para otro hasta que cuaje bien.
Para la presentación, cogemos una bandeja y volvamos la tarta de manera que simule la concha de una tortuga. Para decorar, cortamos los croissants por la mitad para formar la cara y las patas.
Será la delicia de niños y mayores.