No hay nada más confortable que preparar una pizza casera, esta vez con harina integral. El relleno de calabaza, cebolla caramelizada y queso azul está lleno de contrastes.
Ingredientes
260 gr de harina de trigo integral
220 ml de agua
10 ml de aceite
3 gr de levadura fresca
5 gr de sal
2 cebollas moradas
Calabaza
Queso de Cabrales
4-5 hojas frescas de salvia
Sal y pimienta
Preparación
Uno o dos días antes de
hacer la pizza preparamos la masa. Como no tenemos que amasar, la
dejaremos reposando en la nevera y el tiempo de reposo hará el trabajo
por nosotros.
Para ello, mezclamos la harina junto con la sal en un bol y hacemos un hueco en el
centro. Disolvemos la levadura en el agua y la vertemos en el hueco
junto con el aceite. Mezclamos para que los ingredientes se integren
hasta conseguir una masa pegajosa. Dejamos reposar 15 minutos en el bol.
Pasado este tiempo,
volcamos la masa sobre la mesa de trabajo ligeramente enharinada y la
plegamos sobre sí misma unas tres o cuatro veces. Dividimos la masa en
dos partes y las disponemos en dos bols separados previamente untados
con un poco de aceite. Dejamos reposar la masa en la nevera durante uno,
dos o tres días, según cuando queramos hacer las pizzas.
El día de hacer la pizza,
disponemos la masa sobre un papel de horno y con delicadeza le damos
forma con las yemas de los dedos hasta conseguir una masa fina del
tamaño deseado.
Cortamos las cebollas en juliana y las pochamos en una sartén con un chorrito de aceite. Dejamos cocinar a fuego medio hasta que las cebollas estén caramelizadas en su propio azúcar. Reservamos.
Cortamos la calabaza en cubitos pequeños y las cocinamos con un poco de aceite hasta que estén tiernas. Salpimentamos al gusto.
Precalentamos el horno a
250ºC durante unos 20 minutos como mínimo para que cuando introduzcamos
la pizza esté a máxima potencia. Es importante calentar también la bandeja en la que vayamos a cocinar la pizza para que esté súper caliente, de esta manera al introducir la pizza en la bandeja caliente recibirá un golpe de calor quedando la base muy crujiente.
Repartimos la cebolla caramelizada sobre la base de pizza y la calabaza. Troceamos la mitad el queso de Cabrales y disponemos por encima junto con las hojas de salvia.
Horneamos durante 10-12 minutos o hasta que esté dorada y crujiente.
Para servir, repartimos el resto del queso por encima.
NOTA: se puede sustituir el queso por cualquier otra variedad al gusto, sea azul o no.
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